BUENOS AIRES.- Pocos conceptos jurídicos y demasiadas declaraciones cruzadas y críticas políticas siguen rodeando “la novela” de la investigación del vicepresidente, Amado Boudou, sobre su intervención en la quiebra de la ex imprenta Ciccone.

Ayer, el juez federal Ariel Lijo no hizo lugar al pedido de Boudou de televisar “en vivo” la declaración que debe prestar el lunes próximo en la llamada “causa Ciccone”.

El compañero de fórmula de la presidenta, Cristina Fernández, consideró que es “seguro” que el magistrado lo va a “procesar” luego de que su indagatoria, pero advirtió que, aun así, seguirá ejerciendo como vicepresidente.

Fuentes judiciales informaron que Lijo desestimó el pedido de televisación “en virtud del artículo 204 del Código Procesal Penal de la Nación”, el cual establece que “el sumario será público para las partes (...) secreto para los extraños”. También lo fundamentó en los artículos 16 y 18 de la Constitución nacional, que establecen que ante la ley todos los ciudadanos son iguales, que “no hay fueros personales ni títulos de nobleza” y que “es inviolable el derecho a la defensa en juicio”.

Además, el magistrado resolvió la formación del “incidente correspondiente” al pedido de nulidad del llamado a indagatoria. De esta manera, la audiencia en Comodoro Py, quedó firmé, también, porque el juez no hizo lugar a la solicitud de pronta resolución sobre el pedido de nulidad.

Inocencia

Respecto del “seguro procesamiento”, como Boudou evalúa que sucederá el lunes, el vicepresidente advirtió que, aun así, seguirá ejerciendo el cargo. “Por supuesto. En la Argentina hay algo que se llama principio de inocencia. Y hay un sistema judicial que funciona. Yo pretendo creer en ese sistema”, respondió Boudou cuando una panelista del programa “678”, de Canal 7, le preguntó si continuaría en el cargo si es procesado.

Boudou manifestó: “voy a seguir ejerciendo mis funciones. Tengo que llevarlas adelante. Tengo una trayectoria mucho más corta que aquellos que dicen que son de la política, pero se dedican al funcionariado, pero muy intensa, y tuve la suerte de tener una Presidenta con capacidad de liderazgo y tuve la suerte de acompañarla”, enfatizó.

El ex ministro de Economía cuestionó con dureza a Lijo, al aseverar que “este juez es bastante oscuro”, y lo acusó de “tener miedo” a la tapa del diario ‘Clarín’. “Hay que estudiar un poquito juez querido. Hay que sentar la cola señor juez en el expediente, por lo menos para no hacer papelones. Después que haga lo que quiera, que me procese”, lo desafió. Agregó que “el juez tiene miedo. Tendrá algo que ocultar. Los que no tienen nada que ocultar vamos al frente”, lo que arrancó aplausos de sus seguidores que asistieron al programa en la Televisión Pública.

Según dijo el vicepresidente, la citación del lunes “es esa mezcla de llamado a indagatoria y procesamiento” y volvió a desafiar al magistrado a que permita “transmitir en vivo por televisión”.

Falta al respeto

La Asociación de Magistrados repudió las declaraciones de Boudou, luego de que el funcionario arremetiera contra Lijo.

“Como imputado tiene derecho, pero como vicepresidente de un país está obligado a respetar límites que tiene por su investidura”, aseguró Luis María Cabral, presidente de la institución. El jueves a la noche, durante el programa oficialista, Boudou señaló que “Lijo se va al Mundial”, por eso lo convoca ahora a declarar.

Cabral criticó esas expresiones. “La descalificación no puede ser cursada por la vía de la farandulización y mucho menos pretender resolver mediáticamente esta cuestión. Descalificar de manera personal es una forma artera que debe ser desechada para alguien que ejerce un cargo en el Poder Ejecutivo”, sentenció. (DyN-infobae.com)